Mi viernes querido
Cómo esperaba este día, ahora lo único que falta es que termine la jornada laboral, y estamos completos... Estuve sola toda la semana, y no me gustó, lo digo de nuevo. Al menos esta semana no tuve miedo a la oscuridad, y no escuché ruidos raros en mi casa, salvo el portero hoy no sé a que hora, pero no pude reaccionar. Me asusté, pero después dije "si es alguien que viene a casa no toca el portero, porque saben que nunca anda". Ahora hoy para despertarme 20 minutos antes que el despertador sí anduvo. Malísimo. O sea que esta semana la soledad fue más a nivel sentimental, pero bueno, ya pasó. Tengo la cabeza a mil por horas, y a la vez se me ralentiza con la presión. El gran proyecto profesional está poniéndose en marcha, vamos avanzando, a paso lento pero hemos comenzado... mucha emoción por ese lado. A su vez, también tengo otros miles de planes y cosas que organizar que me están volviendo loca... pero bueno, es actividad, eso es bueno... Bueno, creo que esto...