Culinarias
Cuando estoy de buen humor, me encanta cocinar...
Paso por la verdulería, compro cositas, soy creativa, mezclo sabores e improviso...
Anoche mientras cocinaba sola pensaba que no me gusta cocinar sola, pero tampoco con demasiada gente, en realidad creo que me gusta cocinar con alguien que me hable desde la puerta de la cocina (sin molestar mis movimientos).
Creo que con la única persona que puedo cocinar tranquila y nos entendemos es con mi hermano. Tenemos el mismo ritmo en la cocina, nos gustan los mismos condimentos, y tenemos los mismos gustos e instintos culinarios.
Ambos aprendimos a cocinar de la misma persona, mi papá, pero no cocinamos igual que él.
Creo que la cocina es una cuestión de instintos, uno mezcla ingredientes de acuerdo a lo que le va dictando el paladar y el olfato. Yo sobre todo cocino mucho "a ojo", no sigo recetas, esto no es ninguna originalidad, pero me pasa que cuando tengo que seguir recetas por algo en particular, me confundo mucho y tengo que chequear todo el tiempo.
Hay cosas que hago con receta, como el pan, y no sé hacerlas de otra forma. Me olvido el orden de los ingredientes, las cantidades ni te digo...
Anoche también pensaba que mi casa ideal tendría una cocina espaciosa, y conectada con el comedor, una cocina abierta. Así tendría la posibilidad de hablar con alguien mientras cocino, sin tenerlo parado en la puerta, y no sentiría que me estoy perdiendo algo, como me pasa muchas veces.
Además frenaría mi necesidad de irme a hacer otra cosa dejando la comida en el fuego, lo que muchas veces causa desastres varios... ni decir que provoca la furia de N, que no lo comprende.
También pensé en sacar unas fotos para poner acá, pero no me di cuenta, y la idea cuajó tarde.
El menú de anoche fue: Sopa de verduritas licuada (que salió bien fuerte por las cebollas), y risotto con hongos y un gran chorro de vino tinto que sinceramente se me escapó, pero quedó de maravillas.
Hoy me traje un pollo salteado con semillitas de sésamo y girasol en una ensalada de espinaca, zanahoria y tomates bien rojos. Con la porción de sopa de verduras obvio.
Esta noche saco unas fotos a la cena. Me quedaron champignones y pollo, veré que sale.
El finde seguro tendremos más oportunidades culinarias. Sacaré fotos.
Será que este blog devendrá culinario?
Lindo viernes.
Saludos
Paso por la verdulería, compro cositas, soy creativa, mezclo sabores e improviso...
Anoche mientras cocinaba sola pensaba que no me gusta cocinar sola, pero tampoco con demasiada gente, en realidad creo que me gusta cocinar con alguien que me hable desde la puerta de la cocina (sin molestar mis movimientos).
Creo que con la única persona que puedo cocinar tranquila y nos entendemos es con mi hermano. Tenemos el mismo ritmo en la cocina, nos gustan los mismos condimentos, y tenemos los mismos gustos e instintos culinarios.
Ambos aprendimos a cocinar de la misma persona, mi papá, pero no cocinamos igual que él.
Creo que la cocina es una cuestión de instintos, uno mezcla ingredientes de acuerdo a lo que le va dictando el paladar y el olfato. Yo sobre todo cocino mucho "a ojo", no sigo recetas, esto no es ninguna originalidad, pero me pasa que cuando tengo que seguir recetas por algo en particular, me confundo mucho y tengo que chequear todo el tiempo.
Hay cosas que hago con receta, como el pan, y no sé hacerlas de otra forma. Me olvido el orden de los ingredientes, las cantidades ni te digo...
Anoche también pensaba que mi casa ideal tendría una cocina espaciosa, y conectada con el comedor, una cocina abierta. Así tendría la posibilidad de hablar con alguien mientras cocino, sin tenerlo parado en la puerta, y no sentiría que me estoy perdiendo algo, como me pasa muchas veces.
Además frenaría mi necesidad de irme a hacer otra cosa dejando la comida en el fuego, lo que muchas veces causa desastres varios... ni decir que provoca la furia de N, que no lo comprende.
También pensé en sacar unas fotos para poner acá, pero no me di cuenta, y la idea cuajó tarde.
El menú de anoche fue: Sopa de verduritas licuada (que salió bien fuerte por las cebollas), y risotto con hongos y un gran chorro de vino tinto que sinceramente se me escapó, pero quedó de maravillas.
Hoy me traje un pollo salteado con semillitas de sésamo y girasol en una ensalada de espinaca, zanahoria y tomates bien rojos. Con la porción de sopa de verduras obvio.
Esta noche saco unas fotos a la cena. Me quedaron champignones y pollo, veré que sale.
El finde seguro tendremos más oportunidades culinarias. Sacaré fotos.
Será que este blog devendrá culinario?
Lindo viernes.
Saludos
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