Pompiers

Hoy casi prendí fuego mi casa, la cocina al menos.

Me levanté tarde, entonces quise ganar tiempo mientras marido se bañaba. Corté un pan blanco que quedaba por ahí (y que intuyo que marido compró en el chino, con muy mal tino), y lo puse en el hornito a ver si se ponía más decente.

Lo dejé y me fui a cambiar, total corta solo.

Cuando escuché que cortó, fui a verlo y se habían carbonizado. Indignada abro la puerta del hornito, y en ése momento las tostadas se prenden en llamas.

No entendía que pasaba y los primeros segundos me limité a mirar sin saber que hacer. Cuando noté que las llamas aumentaban, me empecé a desesperar. Marido en la ducha y yo incendiado la cocina.

En ése momento pasaron miles de cosas por mi cabeza, entre ellas ponerle papel de diarios (?) y hasta mojé el trapo de la cocina para tirárselo.

Hasta que me avivé de sacar la fuente del horno y meterla en la pileta, donde las tostadas se apagaron lentamente.

Nunca me dí cuenta de lo que me asusta el fuego.

Moraleja: Mandar a arreglar la tostadora, comprar un matafuego para la cocina, y no comprar más pan en el chino (quien sabe qué mierdas incendiarias tiene).

Saludos

p.s.: Marido dictaminó que la culpa la tuvo el pan, y que yo soy inocente.